Carta a Yannick Noah

Para el que no lo sepa, Yannick Noah es un ex-tenista francés. Su máximo éxtio fue ganar Roland Garros -último francés en conseguirlo, allá por el año 1983-. Ayer viernes, publicó un artículo en el periódico francés Le Monde en el que acusaba a nuestros deportistas de estar dopados. Decía que los españoles eran como Obélix, que se habían caído en la marmita de la "poción mágica".

Pues bien, creo que hace falta a recordarle a este señor que ha hecho una imputación sin ningún fundamento. Quizás sea por envidia o por impotencia de que su país no esté a la altura del nuestro.

En el fútbol, España ha maravillado con su juego en una Eurocopa y un Mundial. Con más o menos diferencia de goles, en todos sus partidos arrolló a sus rivales y no hizo el ridículo que sí hicieron los franceses. Primero se clasificaron con una mano increíble de Henry, luego el seleccionador dejó a grandes futbolistas como Lass o Benzema fuera de la convocatoria, y para colmo, en pleno mundial los jugadores dejaron plantados al entrenador -Domenech- en un entrenamiento.

Noah está cansado de ver como en ciclismo Contador arrasa en las grandes vueltas, y como se pasea por los Campos Elíseos con el maillot amarillo. Cansado de ver como los ciclistas españoles ganan en las etapas de montaña, mientras que los ciclistas de su país sólo pueden conseguir el amarillo cuando un coche atropella a los escapados.

En el tenis los franceses están más que dolidos. Casi 30 años si ganar uno de los cuatro grandes, el que se juega en su país. Y para colmo, 8 de los últimos 10 torneos los ha ganado un español (6 Rafa Nadal, 1 Ferrero y 1 Albert Costa). 

Está harto de ver como la Selección Española de Baloncesto gana dos veces a la francesa en 7 días en el Europeo. Una de esas veces en la final. Eso duele, pero el dolor es mayor si ese mismo fin de semana, en el tenis, España elimina a Francia de la Copa Davis. Y si encima, ese mismo día, en Aragón Nico Terol se impone al francés Johan Zarco, la herida es mucho más grande.

También conviene recordarle que Fernando Alonso se hizo bicampeón del mundo. Precisamente con una escudería francesa. O que jugadores como Zidane, Karembeu, Benzema o Abidal vinieron a clubes como Madrid o Barça a triunfar. ¿Y de dónde son esos clubes? Sí, de España.

Con toda seguridad, el artículo que escribió Noah viene desde el resentimiento y del odio hacia España. A decir verdad, motivos no le faltan.